Llenemos la barriga

Hay que aprovechar hasta el último momento del verano, especialmente de las frutas que nos ofrece, uno de los mejores regalos que nos da (además de la cerveza fresca, las siestas...).

Fruta de temporada (escogí melocotón y nectarina).

Ron.

Azúcar morena.

Hojas de menta.

Arandanos para adornar (opcional).

1º Lava, pela y trocea la fruta.

2º Echalas en un bol, junto a dos o tres cucharadas de azúcar, un buen chorro de ron y las hojas de menta troceadas. Mueve muy bien. Introduce en el frigorífico.

3º Servir adornado con los arandanos.

En ocasiones merece la pena un poquito de trabajo en la cocina, el resultado siempre se agradece. Hoy vamos a usar un ingrediente típico de mi tierra: las ñoras. Son unos pimientos de bola que podemos usar tanto frescos como secos, en las famosas ristras.

200 gramos de champiñones limpios cortados en cuartos.

5 ñoras.

1 diente de ajo.

Sal, pimentón picante, aceite, un chorrito de vino blanco.

1º Salteamos los champiñones y hacemos las ñoras a fuego suave. Los apartamos.

2º Cuando las ñoras estén frías las partimos, extraemos la carne, que machacaremos con un tenedor.

3º Laminamos el ajo que echamos en la sartén con aceite caliente, junto a las ñoras, champiñones, las especias y un poco de vino blanco. Los hacemos a fuego fuerte, para que quede un poco caldoso.

4º Servimos caliente junto a pan tostado.

En ocasiones menospreciamos los platos clásicos por su sencillez, craso error, pues en ellos encontramos la sabiduría culinaria condensada, en esta ocasión vamos a usar ingredientes usuales en nuestra despensa, que van a dar como resultado una combinación de sabores sorprendente, otro punto a su favor es la forma de preparación que vamos a usar, al vapor.

Verduras al gusto (escogí unas patatas y brócoli, pero podéis usar las que os gusten).

1/2 pimiento rojo, 1/2 pimiento verde, 1 cebolla mediana, perejil.

Aceite, vinagre de Modena.

1º Cortamos los pimientos, cebolla y perejil en trozos muy pequeños, ponemos en un recipiente con dos medidas de aceite y una de vinagre. Lo reservamos.

2º Limpiamos y cortamos la verdura en trozos. En una olla para cocinar al vapor los ponemos con el agua ya hirviendo. En unos 5 minutos estarán hechas.

3º Servimos las verduras con la vinagreta.

La ventaja de cocinar al vapor es que se hace con suavidad y relativa lentitud, las diminutas gotas de agua forman una capa aislante sobre los alimentos que retiene el calor. El interior de la verdura llega a alcanzar los 82º centígrados. De ahí que se retire con rapidez la verdura, queda un poco crujiente, conservando todas sus propiedades.

Lo malo de que te sobren 3 gambas es que no da ni para una persona, ya no quiero pensar los problemas de división si son más de dos los comensales. Aunque siempre hay una solución, optimicemos esas gambas con un poco de surimi y huevos.

Esas pequeñas gambas, ya limpias y cortadas en trocitos.

Unas baritas de surimi troceadas.

1 o 2 huevos, depende del tamaño.

Una cucharada de harina, un poco de levadura.

Sal, eneldo.

1º En un bol batimos muy bien el huevo, junto a la sal y el eneldo, vamos añadiendo poco a poco la harina y la levadura sin dejar de mover para evitar grumos.

2º Agregamos las gambas y el surimi.

3º En una sartén con aceite caliente vamos echando cucharadas de la masa, que vamos haciendo con cuidado de que no se nos quemen. Una vez hechas las dejamos sobre papel absorvente para quitar el exceso de aceite.

4º Servimos acompañadas de salsa rosa.

Una forma original de comer legumbres, no sólo es que su sabor es maravilloso, sino que comprobareís como muchos niños se fijan más en la forma que el contenido. Desde mi punto de vista, estas hamburguesas no dejan de ser un tipo de falafel, probadlas y  ya me decís. 

1 bote de lentejas ya cocido (si queréis evitar unas horas en la cocina).

1 cebolla tierna.

1/2 pimiento verde y 1/2 pimiento rojo.

50 gramos de pan rallado.

Aceite, pimienta, curry, 1 cucharadita de clavo molido, un diente de ajo picado.

1º Limpiamos las lentejas del líquido de cocción, una vez secas, las trituramos con un tenedor.

2º Cortamos en trozos pequeños la cebolla y pimientos, los añadimos a las lentejas. Agregamos el pan rallado y las especias. Mezclamos bien, guardamos en el frigorífico media hora.

3º Hacemos hamburguesas con la masa, que vamos a ir friendo en una sartén con aceite a fuego medio para no quemarlas..

Si queréis darle un toque distinto haced la receta mitad de lentejas mitad garbanzos. También podéis empanarlas con pan para que se queden más compactas.

En esta ocasión las he servido sobre una ensalada de lechuga y tomate, como acompañamiento podéis usar salsa de tomate.

La lenteja cuenta con bastantes nutrientes,como ejemplo   por cada 100 gramos aporta:

En la sala de espera del dentista (mal necesario, pero mal a fin de cuentas) vi una receta muy original, algo complicada pero que tenía muy buena pinta, la he modificado algo para que se adapte a nuestras despensas. El resultado nos ha gustado, espero que Bruno Oteiza perdone mi injerencia en su original ,que  debe ser espectacular.

1 Bolsa de pasta, elegí los corazones por variar un poco.

Queso mozzarella.

1 cebolla.

Salsa de tomate.

1 vasito de vino blanco.

Aceite, sal , orégano, pimienta, tomillo.

1º Cortamos la berenjena en rodajas finas, salpimentamos, tras media hora para que suelte el líquido las hacemos a la plancha.

2º Cortamos la en trozos pequeños que haremos en una sartén, tras lo cual añadimos la salsa de tomate, especias y el vino. Dejamos hacer a fuego suave unos 15 minutos.

3º Cocemos la pasta, una vez echa la añadimos a la salsa.

4º Emplatamos de esta forma: berenjena, rodajas de mozzarella y pasta por encima.

Si queréis podéis espolvorear queso por encima.

Esta receta es ideal para las personas que están a dieta o simplemente quieren comer bien, puesto que no requiere casi aceite y se hace en muy poco tiempo, grantizando la mayor cantidad de nutrientes, sólo se requiere un poco de maña a la hora de hacer el "rollo".

2 calabacines grandes en filetes muy finos, usad el pelador.

1 cebolla.

Pimiento verde y rojo.

200 gramos de champiñones limpios.

Queso en lonchas.

Aceite, sal, orégano, pimienta.

1º Cortamos toda la verdura en trozos muy pequeños y salteamos en una sartén con poco aceite.

2º Sobre un trozo de papel de plata colocamos el calabacín, digamos que "tapizaremos" la superficie.

3º Ponemos el queso encima, extendemos las verduras por encima y aliñamos. Vamos enrollandolo todo, finalmente lo cerramos con el papel, estilo papillot.

4º En horno precalentado a máxima potencia introducimos el rollo durante 15 minutos.

Podemos acompañarlo de unas patatas cocidas con perejil espolvoreado por encima.

El papillot  es una técnica que consiste en envolver los alimentos, generalmente de consistencia blanda como verdura o pescado, para cocinarlos al vapor, agua u horno. Se garantiza  el máximo sabor y aporte nutricional.

Hoy nos toca un postre, que hace tiempo que los tengo muy abandonados, como siempre será un plato sencillo y barato. Ahora me diréis que los arandanos no son precisamente baratos, tenéis razón, pero podemos sustituirlos por fresas, kiwis, naranja.., así que no valen excusas.

1 paquete de pasta quebrada.

250 gramos de arandanos (o fruta elegida) ya limpios.

1 paquete de queso de untar.

Miel.

1º Mezclamos el queso con miel al gusto, movemos bien, añadimos la fruta y volvemos a mover.

2º Cortamos la pasta quebrada en cuadrados, ponemos en el interior la mezcla, los cerramos como si fuesen un sobre.

3º Colocamos los cuadrados en una bandeja de horno, separados entre si, ya que se van a abrir y pueden pegarse si están muy juntos.

4º En horno precalentado a máxima potencia introducimos la bandeja, bajamos la temperatura a 180º y dejamos un máximo de 5 minutos más o menos, vigiladlos. Servir calientes o fríos acompañados de crema de vainilla.

Convencer a los más pequeños, y no tan pequeños, de comer verduras es un trabajo duro en ocasiones, lo mejor es presentarlas de forma original para que lo vean como algo divertido, en este caso las tortitas de calabacín han dado un resultado muy bueno en casa.

2 calabacines medianos.

1 cebolla.

1/4 de queso (de ese duro olvidado en el frigorífico).

2 o 3 cucharadas de pan rallado.

1 huevo grande.

Sal, Pimienta, nuez moscada.

1º Rallamos el calabacín y lo pondremos en un escurridor para que suelte el agua.

2º Rallamos el queso y la cebolla, los unimos al calabacín. Añadimos el huevo, pan y especias. Lo movemos todo muy bien.

3º En una plancha o sartén antiadherente vamos echando cucharadas de masa, vamos haciendo como unas tortitas normales.

4º Las servimos acompañadas de mostaza suave.

¿No os ha pasado encontrar una pechuga de pollo olvidada en el frigorífico?, escasa para una comida, que si no la haces se tiene que tirar (prohibido tirar comida). Pues la transformamos en un delicioso aperitivo.

1 pechuga de pollo.

1 huevo.

Pan rallado.

Harina.

Sal, pimienta, pimentón picante, guindilla machacada.

Aceite.

1º Cortamos en tiras finas el pollo, las bañamos generosamente en las especias.

2º Pasamos las tiras por la harina, quitamos el exceso, luego las pasamos por el huevo batido y finalmente por el pan rallado.

3º En una sartén con aceite caliente las vamos friendo.

Las servimos calientes acompañadas por salsa brava.

Como de costumbre no tenemos tiempo, mil cosas por hacer y poco tiempo, la sóla idea de media hora en la cocina se nos hace impensable, por eso tenemos que agudizar el ingenio, una ensalada rápida y de ingredientes muy socorridos.

Surimi (depende de la cantidad de gente que coma).

1 lata de piña natural o en conserva.

1 o 2 huevos cocidos.

Jamón de York.

Mahonesa, ketchup, naranja, pimienta.

1º Troceamos el surimi,la piña, jamón y los huevos. Echamos en un bol.

2º Preparamos una salsa rosa muy ligera con 5 cucharadas de mahonesa, 2 de ketchup, un chorito de zumo de naranja y pimienta al gusto.

Servir después de unos minutos en el frigorífico.


La Piña es una fruta muy rica en hidratos de carbono de absorción lenta, posee contenido de proteínas vegetales y es abundante en potasio, yodo y vitaminas A, B y C. Contiene un 85% de agua, hidratos de carbono y fibra, y provee grandes beneficios nutricionales importantes para nuestra salud.
Así mismo es una fruta rica en vitamina C, vitaminas del complejo B, y un bajo valor calórico, apenas 52 calorías cada 100 gramos, lo que hace de la Piña una fruta muy saludable para consumir en dietas para perder peso.

¿A que parece un plato de estos que tienes que empeñar un ojo para pagarlos?, pues dejad el ojo tranquilo que no es necesario. Como de costumbre trataremos de hacer arte con lo que tenemos a mano (o engañar para que crean que somos unos artistas jajajaja).

1 calamar grande por comensal.

Gambas (a ser posible arroceras, las más baratillas).

1 cebolla hermosa.

1 pimiento rojo mediano.

Zanahorias, cebolla, rama de apio.

1/2 litro de caldo de pescado.

1 vasito de coñac.

Sal, pimienta, eneldo.

1º Limpiamos bien los calamares, troceamos los tentáculos y las aletas, reservamos.

2º Pelamos las gambas. Cogemos sus cabezas y cáscaras, las echamos a una olla junto al resto de verduras y sofreímos unos minutos.Rociamos con el coñac y flambeamos, acto seguido agregamos el caldo y dejamos reducir a fuego suave, unos 20 minutos.

3º  Pasamos el contenido de la olla por la batidora, lo colamos. Devolvemos al fuego, esta vez muy suave.

4º En una sartén salteamos la cebolla y el pimiento, una vez hechos apartamos la sartén, mezclamos junto a los trozos de gamba,sazonamos y añadimos el eneldo. Rellenamos los calamares con esa mezcla, cerramos los extremos con palillos. Los introducimos en la olla, dejamos de 5 a 10 minutos, el marisco se hace muy rápido.

5º Servir sobre una base de la salsa, acompañad con un poco de arroz basmati.

Si queremos abaratarlo aun más podemos reducir la cantidad de gambas, sutituyéndolas por surimi.

En cuanto al aspecto nutricional del calamar, es un alimento con un significativo aporte de yodo, selenio, colesterol, vitamina E, calcio, vitamina B3, proteínas, agua y fósforo. El resto de nutrientes presentes en este alimento, ordenados por relevancia de su presencia, son: magnesio, potasio, vitamina B12, vitamina B2, cinc, sodio, calorías, vitamina B, retinol, ácidos grasos poliinsaturados, vitamina A, grasa, vitamina B9, hierro, vitamina B6, ácidos grasos saturados, hidratos de carbono y ácidos grasos monoinsaturados.

Por cada 100 gramos de calamar nos encontramos:

80,40 kcal.

16,25 gramos de proteinas.

144 miligramos de calcio.

190 miligramos de fósforo.

7,04 mg de vitamina B3.

He de confesar que la coca siempre me ha recordado a una pizza, eso sí, con un sabor algo más fino. La que hoy os propongo se hace con unos ingredientes fáciles de encontrar en el frigorífico, así como la despensa, para que no tengáis que ir al supermercado a prisa y corriendo.

Para la masa:

500 gramos de harina normal.

1/2 vaso de agua.

1/2 vaso de aceite.

Sal.

Cobertura:

1 berenjena.

Tomates.

Queso (lo ideal es de cabra, pero si no puede ser, no puede ser, en mi caso tenía queso tierno).

Aceite, sal, especias al gusto.

Tomate frito (opcional).

1º En un bol echamos el aceite, el agua y la sal, vamos añadiendo poco a poco la harina hasta formar una masa. Trabajamos hasta hacer una masa compacta.

2º Estendemos la masa en una lámina que pondremos en una fuente de horno.

3 ºCubrimos la masa con una capa de láminas de berenjena, rodajas de tomate y lonchas de queso. Rociamos con las especias, sal y aceite.

4º En horno a 180º introducimos la bandeja, bajamos el fuego a 150º y dejamos unos 30 minutos máximo.

Podemos cubrir la masa con tomate frito, eso le da una textura más a pizza.

Recordad que las berenjenas es conveniente tenerlas cortadas media hora antes para que suelten el líquido amargo.

Lo curioso de las alcachofas es lo escondidas que tienen sus virtudes, si te las comes sin tratar tienen un sabor amargo algo desagradable, sin olvidar que más de la mitad de su ser tiene que ir a la basura, pero pasados estos dos inconvenientes el resultado es inmejorable, como mostraremos en el siguiente plato.

Alcachofas.

Cebollas.

Jamón de York o champiñones (si eres vegetariano).

Queso.

Aceite, sal, vinagre, pimienta.

1º Limpiamos bien las alcachofas (quitar rabo, hojas exteriores, vaciar los pelillos de dentro) y las cocemos en agua con un buen chorro de vinagre y sal durante 30 minutos a fuego medio.

2º Picamos el jamón o champiñones y cebolla.

3º Una vez cocidas las alcachofas las rellenamos con el picadillo, salpimentamos, cubrimos con queso. Las introducimos en horno precalentado a 180º durante unos cinco minutos.

Existen tantos rellenos como podamos imaginar.

Una cosa, llevad cuidado con el horno, como podéis apreciar en la foto a mi se me fue el santo al cielo y casi se me hacen churrascos, menos mal que llegue a tiempo de salvarlas. Por cierto, deliciosas.

La alcachofa  contiene:

• Vitaminas: A, B6, Calcio, Fósforo, Hierro, Glucidos, Proteínas, H.de Carbono, Magnesio, Potasio y Sodio.
• Los Glucidos concretamente se transforman el azúcar natural o sea en energía.

Está  recomendadas para:

Para acompañar pescado es una de las mejores, es un popurri de sabores que realzan la delicada carne del pescado.

4 cuharadas grandes de mahonesa.

1 cucharadita de mostaza.

1/2 cebolla picada muy fina.

15 pepinillos (aproximadamente).

25 gramos de alcaparras.

Perejil picado fresco.

1º Picamos muy bien todos los ingredientes "solidos".

2º Mezclamos todo en un bol.

3º Servir.

Algunos suelen añadir huevo cocido, es una opción.