Me han regalado una bolsa de chilis, después de hacerlos ristras, usar unos en las comidas (no aconsejable para estómagos delicados) seguían sobrando, así que opté por pedir consejo a "Aquella que todo lo sabe", mi madre (cuando lea ya veremos como salgo jjjj). Resultó una conserva ideal para acompañar platos, comerlos sobre panes y un regalo estupendo para los amigos.
Aunque he usado chilis nada impide hacer la conserva con pimientos dulces.
Chilis.
Un vasito de vino blanco.
1 diente de ajo.
Hojas de laurel.
Aceite.
Sal.
1º En una sartén hacemos los pimientos a fuego medio.
2º Limpiamos los chilis de piel y semillas, en la medida de lo posible.
3º En la misma sartén echamos el vino, el diente de ajo laminado muy fino, una cucharada de aceite, laurel y sal al gusto, dejamos a fuego suave hasta que se reduzca.
4º Añadimos los pimientos y dejamos unos minutos.
5º Echamos en un tarro esterilizado y cubrimos con el aceite de oliva. Dejamos reposar mínimo 24 horas para que los sabores agarren.